Dirigentes o empresarios del espectáculo

Suplemento Ovación (página 2), 

Diario UNO de Mendoza, 6 de abril de 2008

Por estos días queda más en claro que las “vueltas” son de una rosca fallada, que no sostienen ni apuntalan, sino que estrangulan y quiebran.
La Vuelta de Mendoza y la Vuelta de San Rafael ¿para qué sirven?, ¿en qué suman? Son meros espectáculos y negocios (truncos, utópicos o solapados), pero para nada una parte del calendario deportivo de proyección.
Cuando cerró este año la Vuelta de Mendoza, Francisco Chila (presidente de la Asociación Ciclista Mendocina) sacó a relucir que había conseguido que los campeonatos Argentinos vinieran a Mendoza.
Sí logró que nuestra provincia tenga la localía (noviembre de este año, la pista y abril del 2009, la ruta) para el espectáculo mayor del deporte pedal. La ACM actúa más como una empresa de espectáculos que como de asociación de clubes preocupada por el futuro deportivo de sus representados.
En estos días se está corriendo el Argentino en Córdoba y Mendoza no presentó equipos (viajaron un par de pedalistas “sueltos”), algo que no es nuevo.

Quieren ser parte del calendario nacional, pero no planifican en armar verdaderas selecciones de Mendoza (los campeonatos y las vueltas servirían como selectiva), no apoyan a los pedalistas (ni siquiera les pagan los premios de la Vuelta, lo que a varios les hubiera permitido viajar a Córdoba), que terminan siendo los verdaderos responsables de que el ciclismo esté vivo en estas tierras, a pesar de todo.
Mendoza no se merece ser sede del Argentino, más allá de que pueda organizar el espectáculo. Un candidato a sede, en cualquier deporte y disciplina, lo primero que demuestra es un crecimiento deportivo, una organización y sobre todo una buena performance en las pruebas anteriores.
En Mendoza no existe el ciclismo de pista y ruta femenino, y el masculino subsiste gracias al gran esfuerzo que hacen algunos sponsors para estar los domingos en carrera. Y la dirigencia, bien... ya vendrá una Vuelta o algún campeonato que solventado por otro les permita figurar para conservar el poder, ese poder que tiene para no hacer nada.