Lousteau que fue y no fue, el que está y no está, el de aquí y el de allá

Diario UNO de Mendoza (página 7), 22 de julio de 2015

Fue, pero no fue el autor de la famosa resolución 125. Fue, pero no fue el referente de la economía del kirchnerismo. Logró ser redimido por los capitalinos que cacerolearon en su contra y los ruralistas que le cortaron la ruta, y así un día, el domingo, estuvo a un paso de ser el jefe de ese Estado, el autónomo, el del puerto. Pero aún los barrios del norte toman recaudos, ya que si bien sus modales, como buen profesor de tenis, son los apropiados, el pasado reciente es reciente.
Martín Lousteau, el joven economista del portazo, el diputado de ECO, el de los libros 3D, el encantador de Felipes, Cristinas y Lilitas, el de los rulos que sobrepasan cualquier teoría o la justifican con su omisión, el del beso prohibido, el del balotaje del domingo, el de los tres puntos.

Hablamos de quien se dio el lujo de dar por terminada, por lo menos virtualmente, la carrera presidencial de su actual socio mayor, Mauricio Macri, a quien acusó tras la victoriosa derrota de ser el representante de un partido conservador al que no votará más allá de que sean parte del mismo frente (Cambiemos) y al que abandonará si es que en las PASO no ganan los que no ganarán, el mendocino Ernesto Sanz o la correntina Elisa Carrió, para sumar su voto a la bonaerense Margarita Stolbizer, para reafirmar que el desaparecido UNEN sigue vivo y que la ambición del radicalismo los desunió, pero ellos, los supervivientes, seguirán desuniendo y construyendo para algún futuro cercano   vuelvan, por quén no, a ser parte del partido único, del frente oficialista que todo lo puede y todo lo contiene.
Lousteau acompañó esa sorpresa que fue y no fue, y que regalan las encuestas que dicen ser lo que no son, obligando a que el ex presidente de Boca sacara sobre la tarima del escenario del escenario político y entre forzadas sonrisas, papelitos, globos y danzas tinellescas, el plan “z”: una estrategia que constó de una andanada de inesperadas consignas, desesperadas, populistas donde el estatismo ahora parece no es tan malo. Vale recordar que sus renombrados, e investigados, asesores económicos saben de estatizar deudas privadas.
Desdoblamientos y PASO, pasos fallidos y números. La vorágine del poder, para conservar lo establecido y hacerlo parecer como otra cosa ha potenciado el circo político para que sus animales saquen a relucir todas sus habilidades, las de sobrevivencia y las del canibalismo que tanto les gusta y conocen. El Relato se atornilla y lo que se puede cambiar, por ahora, son algunos de los personajes dibujados en las fichas del juego que tiene el resultado final cantado y escrito en el reglamento. Eso parece decir los que fueron, los que son, los que están estampados en alguna de esas fichas.
Tranquilos la novela, sin final abierto, sigue 9 de agosto con un nuevo capítulo, uno de los últimos del año. Ya están las promo y los sondeos que no son sondeos.