domingo, 23 de marzo de 2008

Algunos, cada vez mucho más rápidos y fuertes


Suplemento Ovación (página 2),
Diario UNO de Mendoza,  23 de marzo de 2008

Durante estos días la natación ha sido noticia mundial ya que en el Campeonato de Europa (clasificatorio para los Juegos de Pekín) se han bajado varias marcas históricas, algunas que sorprenden.
El deporte sigue demostrando día a día una fuerte evolución; varias ciencias “trabajan” sobre los cuerpos, que gracias a novedosas técnicas, ritmos y planificaciones de preparación siguen produciendo atletas más fuertes, potentes y rápidos.
Además de lo netamente físico y deportivo, la alimentación y la medicina juegan un papel fundamental sobre los deportistas. El alto rendimiento es eso, no sólo buscar ganar, sino también la superación y el crecimiento.
Si bien reconocemos que son fundamentales un gran entrenador, un preparador físico, un médico y un nutricionista, son necesarias sobre todo planificación e infraestructura.
Pongamos como ejemplo la natación en nuestro medio. Tenemos destacados entrenadores, preparadores
físicos, médicos y nutricionistas. También algunos/as nadadores/as de proyección, pero pocos, y pocos
porque a comparación de años atrás hay menos clubes en la alta competencia, no existe una planificación local de crecimiento y sobre todo, no hay infraestructura.
Infraestructura son piletas (con sus respectivas medidas y condiciones de climatización), planeamiento con calendarios (según los niveles y con la posibilidad de competir en certámenes de de elite) y entre otras cosas capacitación para que los responsables de poner a punto a los nadadores, en este caso, estén actualizados con las últimas tecnologías y teorías en su especialidad.
Ver que a los torneos nacionales va un solo club local demuestra, más allá del poderío de esa institución, la falta de infraestructura, desarrollo y planificación para permitir un crecimiento que contribuya a lograr proyección y consolidación.

lunes, 17 de marzo de 2008

Unos que van por más y otros por menos


Suplemento Ovación (página 2),
Diario UNO de Mendoza, 17 de marzo de 2008

Lejos del bajo perfil, con ganas de cambios y con una mochila (muy pesada por lo que heredó y por las
políticas de seguridad de este Gobierno), la Secretaría de Deportes de la Provincia está “dando guerra”
en varios frentes en busca de una identidad deportiva local.
En lo netamente deportivo, la semana que pasó se realizó el lanzamiento de las becas para los deportistas con posibilidades de clasificar a los Juegos Olímpicos de Pekín, lo que sin duda será más que importante, sobre todo para los atletas amateurs. Aunque, en realidad, a cinco meses del inicio de la máxima competencia ecuménica ya están las plazas ocupadas con los clasificados o las selecciones nacionales ya tienen sus equipos. La actual gestión busca apagar el incendio que se encontró: desorganización, despolitización y desconocimiento. En realidad, las becas para el alto rendimiento se tendrían que haber entregado “ayer” y pensando en los Juegos de Londres 2012. Aunque es cierto que los ciclos olímpicos (olimpíadas) no son los mismos que los políticos....
El tema del Estadio provincial ha sido otro de los problemas que busca solucionar la gente de “deportes”. Todo un karma, ya que otra parte del mismo Gobierno, el Ministerio de Seguridad, es quien obliga e impulsa que se jueguen partidos en el Mundialista, cosas que no quieren (por cuestiones económicas, culturales y deportivas) tanto dirigentes como hinchas de los clubes locales.
Esta semana quedó en claro, tras las fuertes declaraciones de las autoridades de los clubes que participan en los torneos “argentinos” de fútbol, que uno de los principales enemigos que tienen los del balompié menduco es la Policía, que desde hace tiempo ha adoptado como medida de seguridad desintegrar los calendarios, la localía y todo lo que haga posible que no vaya gente a la cancha. Una antipopular estrategia de prevención (no hay qué prevenir), ya que ha quedado en claro que no pueden dar seguridad en cotejos con mil espectadores, y cualquier excusa es buena para hacerlos jugar un día de semana y fuera de sus canchas.
Un despropósito.

domingo, 2 de marzo de 2008

División que parecía sumar pero sólo resta


Suplemento Ovación (página 2),
Diario UNO de Mendoza, 2 de marzo de 2008

El boxeo mendocino vive una situación especial, distinta y contradictoria. En una coyuntura de crecimiento sostenido, tanto en lo estructural como en lo deportivo, desde el año pasado se produjo una división dirigencial que terminó con dos federaciones en “pleno” funcionamiento. Este hecho en un principio fue trampolín “creativo” para los disidentes y una fuerte respuesta de acción para los “oficialistas”.
La Federación Mendocina de Box (FMB) y la Federación Sureste de Boxeo Mendocino (FSEBM) son las
entidades antagonistas que regulan el pugilismo local, que tiene un calendario histórico en cantidad de festivales, clubes y boxeadores.
La división llegó como consecuencia de personalismos, acusaciones y una realidad institucional compleja, derivada de la crisis nacional de los clubes que fueron remplazados por gimnasios y polideportivos
municipales. Esas entidades no tienen representatividad (por no tener personería jurídica) y no pudieron darle el sostén necesario al trabajo de unos pocos dirigentes (que hacen de todo y ad honórem), que terminaron “trenzados” en un absurdo.
La división está, y en un principio ha significado la recuperación y puesta en funcionamiento de una gran cantidad de clubes, boxeadores y plazas, sobre todo por parte de la FSEBM. Pero lo cierto es que la disyuntiva deja sin campo de acción a los boxeadores de la “sureste” que, por ejemplo, ven acotado su campo de acción y su techo competitivo, ya que no pueden participar en los torneos que se organizan en Mendoza (Vendimia, Toro Rodríguez, Cacique y Guantes de Oro) ni en los nacionales, y menos en los
internacionales.
La gran culpable de la división fue la Federación Argentina de Box (FAB), ya que sabiendo de las “diferencias” y viendo los síntomas “divisionistas” no hizo nada por buscar la unión, la conciliación. La
actitud aburguesada y soberbia de la desacreditada entidad madre del pugilismo nacional prefirió ignorar y
luego “castigar”, pero se olvidó de lo más importante: los púgiles, que son el semillero del boxeo argentino.